El adolescente de 17 años, con antecedentes penales, fue arrestado en un robo previo solo semanas antes de la tragedia.
La muerte de Kim Gómez, la niña de 7 años que perdió la vida durante un violento robo en La Plata, ha sacudido a la comunidad. A medida que avanzan las investigaciones, se ha revelado que uno de los dos menores detenidos por el crimen tenía un historial delictivo reciente. El adolescente, identificado como T., de 17 años, había sido arrestado el 1 de febrero junto a otros tres cómplices por robar un automóvil en la misma ciudad.
En esa ocasión, T. y sus compañeros robaron un Ford KA blanco, lo que dio lugar a una persecución policial que culminó con su captura. Este antecedente fue clave para que la policía pudiera identificarlo rápidamente después del crimen de Kim. Aunque su arresto anterior se había decidido devolver a los menores a sus hogares, el caso de Kim subraya la creciente preocupación por la reincidencia en delitos juveniles.
El cuñado de T. reveló que fue el propio padre del detenido quien entregó al joven a las autoridades, asegurando que quien comete un crimen debe enfrentar las consecuencias. El otro adolescente involucrado en la tragedia, de 14 años, también tiene antecedentes de robos.