La reciente controversia en la escuela Oñativia de Salta ha desatado una ola de preocupación en la comunidad educativa. La semana pasada, se reportó que cuatro alumnos de sexto grado de la institución estaban involucrados en intentos de abuso hacia un niño de primer año. La situación generó gran inquietud, especialmente tras la revelación de incidentes adicionales.
Como respuesta inicial, la escuela decidió cambiar de turno a los estudiantes acusados. Sin embargo, la creciente presión de los padres de las víctimas y la opinión pública llevó a una decisión más drástica: los jóvenes fueron trasladados a otra escuela.
La especulación sobre su nueva ubicación pronto surgió, con rumores indicando que podrían ser reubicados en la Escuela Sarmiento. Esta información provocó una oleada de mensajes de preocupación de los padres de estudiantes de la Escuela Sarmiento a los medios de comunicación. «Estamos preocupados por la posibilidad de que estos chicos puedan repetir su comportamiento con nuestros hijos», manifestó una madre preocupada.
En respuesta a estos rumores, la directora de la Escuela Sarmiento, Ada Gareca Vera, negó que los estudiantes provenientes de la escuela Oñativia fueran a integrarse a su institución. Según la directora, no se ha recibido ninguna notificación oficial del Ministerio de Educación sobre el traslado de estos alumnos, y no hay registros de su incorporación en la Escuela Sarmiento.
La comunidad educativa sigue en espera de clarificaciones y acciones adicionales respecto al futuro de los jóvenes involucrados. Los padres permanecen atentos a cómo se gestionará la situación y qué medidas se tomarán para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los estudiantes.
