Emilia Orozco critica las tensiones internas del gobierno, la hipocresía política en Salta y califica al kirchnerismo como «el cáncer» de la Argentina.
El malestar entre Milei y Villarruel
En una reciente entrevista en el programa Mano a Mano de EL10TV, Emilia Orozco trató de justificar las tensiones dentro de la coalición oficialista, atribuyendo las diferencias entre Javier Milei y Victoria Villarruel a divergencias en la «agenda política», más que a una disputa personal. Aunque la diputada subrayó la necesidad de unidad para avanzar en los próximos tres años, sus palabras reflejan una creciente polarización dentro de su bloque, caracterizado por un pragmatismo político que carece de un proyecto coherente.
Oportunismo y contradicciones: Orozco en la mira
Emilia Orozco, ha mostrado en el pasado una serie de contradicciones que evidencian su oportunismo político. A pesar de presentarse como defensora de la transparencia, aceptó, junto a Carlos Zapata y Julio Moreno, la invitación a un exclusivo evento en la Quinta de Olivos organizado por Javier Milei, para agasajar a los 87 diputados que respaldaron su veto al aumento de las jubilaciones.
Además, en relación al proyecto de Ficha Limpia, que ella misma apoyó con firmeza, criticó a los ausentes en la votación del 20 de noviembre, pero sorprendentemente estuvo ausente en la nueva convocatoria del 28 de noviembre, lo que expuso su falta de compromiso con los principios que dice defender.
Orozco y la hipocresía de la coalición
Volviendo al piso de EL10TV, Orozco también se refirió al caso del diputado Edgardo Kueider, arrestado por intentar cruzar la frontera con grandes sumas de dinero sin declarar. La diputada, lejos de cuestionar la problemática de la corrupción, prefirió señalar al kirchnerismo: “Es increíble cómo siempre se asocia todo lo malo con nosotros. Kueider ingresó al Congreso bajo el kirchnerismo, es claro que deben hacerse responsables”, aseguró Orozco. Lo que no mencionó es la creciente complicidad de la propia coalición de La Libertad Avanza con figuras que han jugado en el mismo terreno político de los que hoy critica.
Salta: La doble moral de los «libertarios»
La diputada también se refirió a la situación política de su provincia, Salta, denunciando el oportunismo de aquellos que, después de haber apoyado al kirchnerismo, ahora se presentan como libertarios. En su discurso, Orozco lanzó duras críticas hacia estos «cínicos» que, según ella, «hasta diciembre acompañaron a Massa con todos los recursos de la provincia». Sin embargo, la reflexión de la diputada ignora el hecho de que su propio bloque ha coqueteado con alianzas estratégicas de conveniencia y que, más allá de las ideologías, la verdadera política se ha basado en el poder y los beneficios personales. En lugar de fomentar un verdadero cambio, Orozco parece más interesada en hacer lecturas superficiales de la realidad.
La crítica desmesurada a Cristina Kirchner
Finalmente, y como cierre de su intervención, Orozco no escatimó en calificativos al referirse a Cristina Fernández de Kirchner, tildando al kirchnerismo de ser “uno de los peores males que le ha pasado a la Argentina”, comparándolo con un “cáncer”. Es curioso que la diputada, al igual que su coalición, siga centrándose en los fantasmas del pasado mientras su propio frente se encuentra plagado de contradicciones y falta de propuestas claras para un futuro distinto. Su postura, más que una crítica constructiva, parece ser un intento de desviar la atención de las limitaciones internas y de la falta de coherencia de la actual gestión.
En resumen, las palabras de Orozco y su crítica al kirchnerismo parecen más un intento desesperado por tapar las profundas grietas dentro de un frente que, a pesar de su discurso sobre el cambio, continúa mostrando signos claros de oportunismo y falta de rumbo.
