El presidente completó las vacantes del tribunal máximo con dos nombramientos que han generado críticas en el ámbito político y judicial.
Javier Milei, anunció la designación por decreto de los jueces Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para la Corte Suprema de Justicia, con el objetivo de normalizar el funcionamiento del tribunal, que hasta ahora contaba con solo tres miembros. La decisión, tomada en comisión, se enmarca en la necesidad de completar las vacantes dejadas por Elena Highton de Nolasco en 2021 y Juan Carlos Maqueda a finales del 2024.
Sin embargo, los nombramientos han desatado una fuerte polémica. Lijo, señalado por su cercanía con la política, y García-Mansilla, crítico del aborto legal, han sido duramente cuestionados por la oposición, que considera estos nombramientos una maniobra política. A su vez, el kirchnerismo advirtió que pedirá la destitución de cualquier designado que acepte el cargo sin pasar por el Congreso.
Con esta medida, Milei completa la Corte Suprema sin la intervención del Senado, lo que ha sido criticado por diversos sectores, mientras que el gobierno argumenta que la falta de aprobación en el Congreso ha retrasado los nombramientos.