La menor oferta de ganado y la fuerte demanda impulsan los aumentos, con cortes que ya superan los $11.000 por kilo.
La escasez de hacienda, que se redujo un 15% en el Mercado Agroganadero de Cañuelas, adelantó un incremento de precios en la carne que se esperaba para febrero. Desde hace 15 días, la menor oferta de ganado ha llevado el precio del novillito por encima de los $3000 el kilo, y se prevé un aumento de entre un 5% y un 7% en los mostradores, con subas de entre $1000 y $1200 por corte.
Este aumento se debe a varios factores, como la caída en la faena y la menor oferta de ganado, junto con una demanda firme tanto a nivel interno como externo. Además, se estima que en 2025 la producción de carne caerá entre un 6% y un 7%, lo que podría prolongar los aumentos durante los próximos trimestres. A pesar de estos incrementos, los analistas consideran que el mercado absorberá el impacto sin mayores dificultades.
En el mostrador, los nuevos precios ya reflejan los aumentos, con cortes como la nalga a $11.250 el kilo, el peceto a $14.499 y la paleta a $7999. Se espera que la demanda continúe creciendo en los próximos meses, impulsada por el regreso de los consumidores tras las vacaciones.