El hecho que desató la polémica
Nicolás Alcalá, un vecino del barrio San Justo, se encuentra bajo investigación tras haber hecho «justicia por mano propia» después de un robo en su negocio. En el incidente, los delincuentes se llevaron las zapatillas de sus hijos y 2 millones de pesos. Alcalá, en un acto de represalia, atrapó a los supuestos ladrones y los ató a un poste.
Los videos del suceso, que Alcalá difundió en redes sociales, rápidamente se volvieron virales. Ayer, en horas del mediodía, la brigada de investigaciones se presentó en su domicilio y procedió a su detención, aunque sin ofrecer mayores explicaciones.
Reacciones familiares y judiciales
La madre de Nicolás expresó su indignación: «No sé dónde está mi hijo, solo sé que lo detuvieron. La justicia recién está actuando después de muchos días. El CIF fue recién ayer a buscar huellas cuando ya estaba ordenado el caos que dejaron los ladrones. Mi hijo es inocente, solo quiso castigar a quienes le hicieron daño».
La fiscal Elisa Pérez ha iniciado una investigación por privación ilegítima de la libertad y lesiones en contra de Alcalá. El juez Jorge Villada, al comentar el caso, señaló que se trata de un accionar «entendible, pero no justificable por la justicia», reflejando así la complejidad del fenómeno de la justicia por mano propia en contextos de inseguridad.
