En solo seis horas, cayeron 165 mm de agua en varias ciudades turísticas, dejando rutas bloqueadas, vehículos varados y una creciente emergencia.
El sur de Brasil vivió un caos debido a un temporal que causó graves inundaciones, cortes de ruta y deslizamientos de tierra. Las zonas más afectadas fueron Camboriú, Florianópolis e Itapema, destinos turísticos populares entre los argentinos que disfrutan de sus vacaciones de verano. En tan solo seis horas, las autoridades reportaron 165 milímetros de lluvia, lo que provocó serios trastornos en el transporte y servicios.
La emergencia sigue en curso, con nuevas lluvias previstas para los próximos días y temperaturas elevadas que podrían empeorar la situación. Las autoridades locales pidieron a los turistas y residentes que se mantuvieran en lugares seguros y evitaran desplazamientos innecesarios para prevenir mayores riesgos.
