El huracán Milton, clasificado como categoría 4, se dirige hacia la costa oeste de Florida, generando alarmas entre millones de residentes. Con vientos que superan los 250 km/h y una presión atmosférica en descenso, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) advierte sobre su potencial destructivo en áreas como Tampa, donde se prevé que toque tierra entre el miércoles y jueves.
Milton, que se formó rápidamente a partir de una tormenta tropical, ha mostrado una «rápida intensificación» debido a las cálidas temperaturas del Golfo de México. Aunque ha bajado a categoría 4, se teme que pueda volver a fortalecerse. Su trayectoria hacia el noroeste, a 19 km/h, aumenta el riesgo para las zonas costeras.
Las autoridades han señalado que Milton podría ser uno de los huracanes más destructivos en la historia de Florida, con marejadas ciclónicas que podrían alcanzar hasta 4,5 metros en algunas áreas. La combinación de vientos intensos y lluvias podría provocar inundaciones severas, daños a la infraestructura y prolongados cortes de electricidad.

En respuesta a la inminente llegada del huracán, se han emitido órdenes de evacuación en varias localidades, incluyendo Tampa. Las rutas de evacuación están congestionadas, y se han habilitado refugios adaptados a protocolos de seguridad. La Guardia Nacional de Florida está en alerta máxima para asistir una vez que sea seguro.


La comparación de Milton con huracanes históricos, como Charley e Irma, resalta la preocupación por el impacto que podría tener en una región que no ha sido golpeada directamente por un gran huracán desde 1921. Aunque Milton podría debilitarse tras tocar tierra, aún se esperan lluvias torrenciales y riesgos de inundaciones en su trayectoria.
Este fenómeno meteorológico subraya la necesidad de estar preparados y alerta ante la capacidad de los huracanes para intensificarse rápidamente, reforzando la importancia de las advertencias tempranas y las medidas preventivas.
