Federico Saavedra, titular de la Unidad Médica Presidencial durante la presidencia de Alberto Fernández, brindó su testimonio ante la fiscalía en el marco de la causa de violencia de género que Fabiola Yañez, la exprimera dama, ha iniciado contra el exmandatario. La declaración de Saavedra, que se extendió por cuatro horas, ofreció detalles sobre el tratamiento que le proporcionó a Yañez para un hematoma en el rostro.
Saavedra relató que el 26 de junio de 2021, Yañez se comunicó con él por teléfono informándole sobre un moretón en uno de sus ojos. Debido a que Saavedra estaba enfermo de COVID-19 y no podía desplazarse a la quinta presidencial, recomendó el uso de globulitos de árnica y heparina, considerando que el caso no revestía gravedad.
Cuatro días después, Saavedra visitó personalmente a Yañez en la residencia de Olivos. Durante esta visita, observó que el hematoma había disminuido en intensidad pero aún persistía. Aconsejó continuar con el tratamiento y, en su testimonio, mencionó que la exprimera dama y Fernández se mostraban en buenos términos durante su visita.
En la declaración, Saavedra presentó un chat con Yañez en el que confirmaba la recomendación del tratamiento. También señaló que en la misma fecha de la visita, se había planeado que Yañez y Fernández firmaran el consentimiento para una inseminación, lo que, según los medios, podría haber influido en la decisión de Yañez de no denunciar inmediatamente.
La fiscalía preguntó a Saavedra si había observado hematomas en otras ocasiones en Yañez, a lo que el médico respondió negativamente, señalando que esta había sido la única vez. También aclaró que no tenía conocimiento de episodios de violencia física por parte de Fernández.
En contraste, Yañez ha declarado que el hematoma ocurrió en julio de 2021 después de una discusión con Fernández, en la cual ella alegó haber recibido un golpe de puño. La exprimera dama detalló que, a pesar de tener un compromiso oficial en Misiones, viajó con el moretón visible y que el ojo, inicialmente enrojecido, empeoró con el tiempo.
Yañez añadió que, tras regresar a Olivos, ella y Fernández contactaron a Saavedra, quien le proporcionó globulitos de árnica y le recomendó que el golpe se resolvería con el tiempo. La exprimera dama describió su experiencia como una obligación de permanecer en casa para evitar que el hematoma fuera visto por otros.
