El Gobierno argentino se prepara para reglamentar un aspecto del capítulo de educación de la Ley de Bases original, lo que incluirá la posibilidad de que las universidades cobren matrícula a estudiantes extranjeros. Esta medida también implicará una modificación en los criterios de distribución de recursos destinados a las instituciones de educación superior, alineando el financiamiento con la cantidad de alumnos que asisten y los egresos que generan.
Se espera que la reglamentación sea oficializada en los próximos días por el Ministerio de Educación, encabezado por Federico Sturzenegger. Un aspecto clave será determinar si este anuncio se realizará antes o después de que las Cámaras legislativas aborden el veto del presidente Javier Milei a la Ley de Financiamiento Universitario.
Una vez implementada la normativa, serán las propias universidades las que decidirán si cobrarán o no a los estudiantes extranjeros, ya que actualmente esa posibilidad está prohibida en el país. La nueva reglamentación también contempla restringir el acceso a la educación superior únicamente a residentes argentinos.
Además, se modificarán los criterios de distribución de recursos presupuestarios en función de la cantidad de alumnos matriculados y el número de egresos, lo que podría influir en la gestión financiera y académica de las instituciones educativas. Estas reformas buscan optimizar el uso de los recursos y asegurar que se alineen con las realidades de cada casa de estudio.