Cada 24 de febrero, los trabajadores del sector automotor celebran un día histórico, nacido en el corazón del sindicalismo argentino.
En Argentina, el 24 de febrero tiene un significado especial para los mecánicos. Esta fecha, establecida en 1974, conmemora el trabajo y la lucha gremial del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA). Aunque en la actualidad se reconoce como una jornada dedicada a estos trabajadores, su origen está profundamente vinculado a un contexto político y sindical de la época.
La conmemoración fue solicitada por Adolfo García, secretario General del SMATA, con el objetivo de rendir homenaje al esfuerzo de los mecánicos. Lo curioso es que, además de ser un tributo laboral, el día coincide con las elecciones presidenciales que llevaron a Juan Domingo Perón de vuelta a la Casa Rosada, marcando un hito en la historia del país.
Aquel 24 de febrero de 1947, el SMATA ya llevaba dos años de trabajo sindical arduo, lo que convirtió esta fecha en un símbolo de la lucha por la soberanía política y la justicia social del gremio. Desde entonces, los mecánicos disfrutan de un día no laborable y pago, como reconocimiento a su esfuerzo en la construcción del movimiento sindical argentino.