El Gobierno reafirma su intención de reducir la edad para ser considerado penalmente responsable tras la tragedia que cobró la vida de una niña de 7 años.
La conmoción por la muerte de Kim Gómez, una niña de 7 años, durante un robo en La Plata, provocó que el Gobierno nacional insistiera en la necesidad de modificar la edad de imputabilidad penal. Tras conocer que los sospechosos del crimen son dos menores de 14 y 17 años, el vocero presidencial, Manuel Adorni, reafirmó el compromiso de impulsar la reforma legislativa. “Es una aberración más por parte de asesinos que no pueden seguir conviviendo en sociedad matando gente”, declaró.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su par de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, habían confirmado a mediados del año pasado el envío de un proyecto de ley al Congreso para reducir la edad de imputabilidad de los actuales 16 a 13 años. La propuesta, que establece un “Régimen Penal Juvenil”, fue debatida pero no tratada con urgencia en el ámbito parlamentario.
El proyecto busca establecer que los adolescentes de entre 13 y 18 años sean considerados penalmente responsables y puedan ser privados de libertad en establecimientos especiales. Además, contempla que los menores delincuentes reciban medidas rehabilitadoras, como asistencia educativa, programas de formación laboral y tratamiento psicológico. Las penas varían entre 3 y 6 años de prisión, salvo en los casos más graves, como homicidios o delitos con violencia extrema.