En un giro abrupto de los acontecimientos en el entorno deportivo y diplomático, el subsecretario de Deportes, Julio Garro, fue despedido tras sus comentarios sobre la polémica generada por Enzo Fernández y la Selección Argentina. La controversia se desencadenó cuando Garro sugirió que Lionel Messi y el presidente de la AFA deberían pedir disculpas por un incidente que involucró a jugadores argentinos y franceses. La Oficina del Presidente emitió un comunicado enfatizando que ningún gobierno puede dictar los comentarios de la Selección Nacional o de cualquier ciudadano, lo cual resultó en la inmediata destitución de Garro de su cargo.
El conflicto se originó durante una entrevista matutina en Urbana Play, donde Garro expresó la opinión de que las disculpas serían necesarias para mantener el prestigio nacional frente a la gloria deportiva. Esta postura desató críticas contundentes dentro del propio partido y del entorno de Javier Milei, quien manifestó su descontento públicamente. Otros cercanos al presidente también rechazaron las sugerencias de Garro, afirmando que Messi, como ícono deportivo, no debería disculparse ante lo que consideraron críticas injustificadas de Francia.

En medio del revuelo, Enzo Fernández se vio obligado a disculparse por un video que se viralizó en redes sociales, donde se escuchaban expresiones ofensivas durante las celebraciones de la Copa América. La Federación Francesa de Fútbol respondió con un comunicado contundente, anunciando posibles acciones disciplinarias contra los jugadores argentinos por comportamiento considerado racista y homofóbico.
En el complejo escenario diplomático que se desplegó, la disputa no solo afectó las relaciones entre ambas naciones, sino que también resonó en los círculos políticos y deportivos de Argentina, subrayando la sensibilidad y la repercusión global de los incidentes dentro del deporte más popular del mundo.
