En la era digital actual, el robo de datos personales y contraseñas se ha convertido en una amenaza crítica que afecta tanto a individuos como a empresas. Este tipo de ciberataques, donde los datos de inicio de sesión son comprometidos y utilizados fraudulentamente, representan un riesgo significativo según el informe X-Force Threat Intelligence Index 2024 de IBM.
El estudio revela que un alarmante 33% de los ciberataques en Latinoamérica están relacionados con el robo de datos, destacando la vulnerabilidad de las organizaciones frente a esta modalidad delictiva. Los hackers, en su búsqueda por obtener información valiosa, explotan debilidades en sistemas de seguridad y comportamientos de usuarios.
Francisco Lugo, ingeniero de soluciones, explica que los hackers utilizan diversas tácticas, como el phishing y keyloggers, para obtener acceso no autorizado a cuentas personales y corporativas. Desde el uso de contraseñas débiles hasta la explotación de vulnerabilidades en aplicaciones web desactualizadas, las técnicas empleadas son variadas y sofisticadas.
Para mitigar estos riesgos, las organizaciones deben implementar medidas robustas de seguridad. Entre las estrategias recomendadas se incluyen la autenticación multifactor (MFA), el uso de gestores de contraseñas, la actualización regular de software, la capacitación en ciberseguridad para empleados y la implementación de soluciones de monitoreo y auditoría.
Ante el creciente panorama de amenazas cibernéticas en la región, proteger la integridad de los datos se vuelve una prioridad absoluta para mantener la confianza y seguridad en el entorno digital.