Desde el viernes por la mañana, la Escuela Sarmiento, situada en el centro de Salta, enfrenta una crisis de incertidumbre y preocupación. Varios estudiantes de 7° grado del turno mañana resultaron intoxicados, y 11 de ellos requirieron atención médica en el Hospital Materno Infantil.
El Cuerpo de Investigadores Fiscales, bajo la dirección del Fiscal Penal Ramiro Ramos Ossorio, se encuentra en plena investigación para determinar las causas de la intoxicación. Sin embargo, la comunidad educativa sigue sin recibir información concreta sobre el incidente.
A medida que la situación se desarrolla, el malestar entre los padres crece. Verónica Robledo, madre de un alumno de 4° grado, expresa su frustración: «Lo único que sabemos es que no hay clases. No hay información oficial de la escuela. Nos enteramos de lo que ocurre a través de los medios o de otros padres que tienen información de primera mano.»
Robledo relata que, el día del incidente, su hijo no asistió a la escuela. Su esposo se dirigió a la institución para informar la ausencia, y fue allí cuando comenzó a enterarse de la situación. «Cuando llegó, los niños estaban descompensados y las maestras no sabían cómo proceder. En ese momento, ni la directora ni la vicedirectora estaban presentes, solo estaban los docentes del turno mañana y la vicedirectora del turno tarde.»
A medida que la investigación avanza, la falta de comunicación oficial y la suspensión de clases mantienen a los padres en la espera de respuestas claras sobre lo sucedido y el futuro de sus hijos en la escuela.
