El ex presidente enfrenta cargos de lesiones leves agravadas, lesiones graves y amenazas coactivas, y se le levantó la prohibición de salida del país.
El juez federal Julián Ercolini procesó a Alberto Fernández por delitos de violencia de género contra su ex pareja, Fabiola Yañez. Las acusaciones incluyen lesiones leves agravadas, lesiones graves agravadas y amenazas coactivas. El fallo se basa en pruebas que indican que los hechos se cometieron en un contexto de violencia de género y fueron reiterados en al menos dos ocasiones.
En su resolución de 184 páginas, el juez Ercolini destacó que la relación de poder entre ambos había sido «asimétrica», lo cual contribuyó al desarrollo de un patrón de abuso. Entre las pruebas clave, se encuentran los moretones que Yañez mostró en su brazo y ojo derecho, los cuales el juez vinculó a golpes propinados por el ex presidente.
Ercolini también analizó los mensajes de WhatsApp entre la pareja, imágenes y testimonios, así como los informes psicológicos de Yañez, los cuales documentaron diversas formas de violencia psicológica, física y económica. Según las profesionales que trabajaron en el caso, este comportamiento habitual y continuo deterioró gravemente la salud mental de la ex primera dama.
El ex presidente fue indagado a principios de este mes y negó las acusaciones, defendiendo su posición con una declaración en la que afirmó: «Si debo decir que si alguien fue agredido en la pareja, ese fui yo. Si alguien debió soportar insultos y malos tratos en la pareja, ese fui yo».
