La Cámara de Casación Penal de Entre Ríos dictó hoy la «inmediata captura» del exgobernador Sergio Urribarri, condenado en 2022 a ocho años de prisión por corrupción. La decisión se produce tras un largo proceso judicial en el que se lo halló responsable de utilizar fondos públicos para financiar su campaña electoral, entre otras maniobras ilegales que involucraron contratos de imprenta y publicidad. La medida, sin embargo, no implica el inicio de la pena, ya que la condena aún no es firme y Urribarri tiene pendiente un recurso ante la Corte Suprema.
Urribarri, quien fue embajador en Israel durante el gobierno de Alberto Fernández, había sido condenado el 7 de abril de 2022 y su sentencia confirmada en 2023 por la Casación provincial. Aunque la Cámara había rechazado previamente la solicitud de prisión preventiva, esta mañana, tras un nuevo pedido de la fiscalía, se ordenó su detención hasta que la condena quede firme. En su defensa, el exgobernador sigue apostando a que la Corte Suprema pueda revertir la decisión.
El caso ha generado un gran revuelo en la política local, dada la prominencia de Urribarri en la historia política de Entre Ríos y su vínculo con la administración kirchnerista.